Extraido de la página http://www.filomusica.com/
La PCO ha dejado una gran herencia, siendo en sí misma uno de esos “ismos” destacables en este último siglo que consiguieron aportar alegría y emoción al onanismo contemporáneo y a la ignorancia de las manzanas podridas que siempre existen en todos los campos (en algunos más que en otros), haciendo duradera y eterna su obra. Con la muerte de Simon Jeffes, en el año 1.997, desapareció, pero hoy en día sus discos están más en alza que incluso en sus principios. Y es que uno de los mayores atractivos del grupo está en lo inclasificable de su estilo, en esa extraña unión ecléctica que es imposible de definir y que la hace único, pero siempre bajo un cariz clásico (y, de hecho, como se verá, nació en este ambiente). Pero, puestos a encuadrar de forma matemática y exacta en algún vector a esta formación, lo haremos siguiendo los principios de una ecuación: si serialismo es X, y minimalismo es Y, entonces una unión de los dos más unos conceptos harmónicos y una buena base forman el (definición del propio Jeffes) “Minimalismo folklórico de cámara” (= Z) que cosechó la Penguin, o, leyéndolo todo junto, el naïfismo musical. La PCO fue la encargada de la puesta en escena sonora de este difícil movimiento, y lo hizo de una manera increíble. Tras ellos, sus reminiscencias son incontables hoy en día: Yann Tiersen, Jean-Philippe Goudé, Klimperei,... y un largo etc.(incluso se habla de una generación de grupos, donde está el último, que salieron de su influencia).
Su labor es ingente, tocando todos los extremos musicales, y, para más, al no tener una discografía muy extensa (8 obras más dos recopilatorio y una grabación de DECCA tan solo disponible por Internet) y como siempre encontraremos alguna referencia disponible en cualquier biblioteca pública o Fonoteca, ¿es que alguien todavía no los ha escuchado? Muchos desconocen que hay y quién está detrás de este grupo, pero ahora intentaremos saciar su curiosidad.
Perpetuum mobile.
Simon Jeffes nació en Sussex, Inglaterra el 19 de Febrero de 1.949, y murió en este mismo país el 11 de Diciembre de 1.997 de un tumor cerebral. Después de pasar una pequeña estancia en Canadá y recorrer Europa (cosa que influyó mucho en su composición multicultural), regresa a Inglaterra y a la edad de 12 años comienza a estudiar la guitarra y su modalidad clásica, piano, y teoría musical (de hecho, como bien sabemos, todo aquel que se introduce en la música clásica actual debe ser un buen teórico), estudiando en la Politécnica de Chiswick con la intención de seguir su formación en un centro superior. Pero, desengañado con la formación académica que se impartía en esas épocas, decide dejar sus estudios y dedicarse a la experimentación, trabajando la música étnica y con varios grupos y artistas de éxito de aquellos años (como los Sex Pistols). Esta reacción se debe al rígido serialismo que se imponía en Darmstadt (Alemania) y su famosa escuela (a la que tenemos que agradecer que indirectamente nos haya dado música tan maravillosa) a la que Jeffes desafío con la alegría y vivacidad de su partitura, dando así también una respuesta a los Glass, Riley, Reich, y cía que en América también hacían de las suyas.
El nacimiento del nombre de la orquesta es más que curioso: en el año 1.972 Jeffes se encontraba en el sur de Francia, y, a consecuencia de un pescado en mal estado, empezó a tener alucinaciones. En sus extraños sueños vio una especie de edificio donde se sucedían extrañas escenas de lo más pintoresco y cuyo propietario sería él: el Penguin Cafe. El significado de Café no viene como el de un bar, sino como el de un sitio donde la comunicación y el pensamiento fluyen libremente y no hay barreras de ningún tipo.
Así, junto a Helen Liebmann (cello), Gavyn Wright (violín), Steve Nye (teclados), la voz de éste último y de Emily Young en un par de temas (quien, por cierto, es la que ha dibujado todas las portadas de los álbunes, que representan la ambigüedad que guarda el estilo de este grupo) y el propio Simon Jeffes a la guitarra eléctrica nació “Music from the Penguin Cafe” en el año 1.974. Este trabajo se escapa un poco de lo que es la esencia del grupo, no solo porque es el único álbum donde aparecen canciones, sino también por su apariencia un tanto ambiental que se debe, más que nada, a la producción de Brian Eno (fue su sello Obscure Records el que sacó a la luz a este grupo, al igual que también fue el que publicó los primeros trabajos de Nyman, aunque hoy en día éste no hable muy bien sobre él; y otros artistas importantes). De aquí tenemos que destacar el primer tema, “PENGUIN CAFE SINGLE” (6.15) que es una exquisita maravilla que ya nos deja con ganas de escuchar más, un magnífico comienzo que define posiblemente la magistral carrera de este conjunto. Con la sección de cuerda predominando en toda la sinfonía, y pequeños toques de guitarra eléctrica, la pieza comienza con ritmo lento para detenerse sobre la mitad de la duración con una serie de “desvaríos” instrumentalmente inexplicables (muy propios del minimalismo, que se repetirán en más cortes del disco) e ir retornando el mismo ritmo del principio pero con un tono más rápido. Un tema original, imaginativo, con aire irónico y muy humorístico, que como ven, es bastante difícil explicar, por eso escúchenlo y me entenderán mejor.
Air á Danser.
Otro destacable aquí: “GILES FARNABY’S DREAM” (2.19), donde se rememora al autor inglés isabelino (lo siento, pero al nombrar a este compositor me veo en la obligación de meter entre estos paréntesis que forman un inciso una referencia más contra la ignonimia, para recordar que sí, que para aquellos que todavía creen que hay una “recuperación de música antigua” en la pedante y engreída obra de Jordi Savall (u otros semejantes), que se paren a escuchar las revisiones isabelinas llevadas a cabo por la formación de la que aquí se trata, o los discos de The Hilliard Ensemble y Jan Garbarek (apunten: Officium y Mnemosyne, que son dos de los mejores mde este último siglo y que contribuyeron también al esperanzador y excelente “Renacimiento” de la música secular), o a las Anonymous 4, y verán que de verdad los únicos que necesitan recuperarse son ellos), mezclándose los instrumentos renacentistas con los actuales de forma respetuosa y coherente que provocará a más de uno para interesarse por la música de esa época (destacar también que este corte está dentro de una mega pieza de este álbum llamada “ZOPF” formada por 7 temas que más tarde darían lugar a una discográfica con este nombre y a un término relacionado de lleno con la PCO). Y para terminar, todo un clásico del minimalismo: “THE SOUND OF SOMEONE YOU LOVE WHO´S GOING AWAY AND IT DOESN’T MATTER”, una “suite” neoclásica de casi 12 minutos de duración entrañable y relajada que bien puede tender a la sensiblería, lo cual sería algo equivocado, ya que va por caminos más dignos, y que se basa en un esquema casi similar al primer tema: un ritmo que va subiendo, una parte “surrealista”, y vuelta al mismo ritmo. Una magnífica combinación para no separarnos del “hilo” de la melodía y quedarnos en suspense.
En definitiva, este primer disco no es de los más aclamados del grupo, pero sí es su confirmación como referencia y su anuncio de que algo grande iba a pasar.
Con el segundo álbum: “Penguin Cafe Orchestra” (1.981), estamos por fin ante toda una obra maestra. Hoy en día todavía sigue en lo más alto, y no es de extrañar, ya que aquí, aunque no están sus temas más conocidos, empieza a cambiar la cosa: “AIR A DANSER” (4.30), un emotivo tema con la guitarra y voz acompañando; “TELEPHONE AND RUBBER BAND” (2.28): donde oímos el sonido de un teléfono a la vez que sube el ritmo y lo acompañan más instrumentos, y que se ha convertido en todo un himno; “CUTTING BRANCHES FOR A TEMPORARY SHELTER” (3.09), una especie de nana étnica y, uno de los mejores: “PYTHAGORA’S TROUSERS” (3.18), que seguramente nos recordará a un “juego de niños”.Obligatorio.
Tercero: “Broadcasting from home” (1.984). Aparece por fin el conocidísimo (gracias a la publicidad) “MUSIC FOR A FOUND HARMONIUM” (2.57), que es el que cambiaría la historia del grupo otorgándole categoría histórica. Una pieza “giratoria”, que se mueve por los dos puntos cardinales de esta banda: las tendencias folklóricas (de aire serio y étnico, no confundir con residuos célticos ni “paletismos”) y el clasicismo, y que es realmente excelente. Seguro que esta melodía y la anterior del teléfono ya la han oído. Aquí, el resto de temas trabajan con la electrónica, cosa poco habitual en el grupo y que no han querido utilizar aún estando “de moda” años después, destacando más que nada esta característica.
El cuarto: “Signs of life” (1.987), en donde se encuentran “ROSASOLIS” (inspirado otra vez en Farnaby), el “OSCAR TANGO”, y “PERPETUUM MOBILE” (que es de los cortes con más reputación del conjunto), y se vuelve a los inicios, como en “WILDLIFE”, que es un clásico del ambient.
Quinto: “Union Café” (1.993): “SCHERZO AND TRIO” (6.55),” NOTHING REALLY BLUE” (5.17), “CAGE DEAD” (4.33, en memoria de John Cage, muy bohemio y minimal), y demás, dejando constancia y otorgando un aire más despreocupado y lúdico al jazz, con el que se experimenta obteniendo buenos resultados.
A todos estos se unen 2 trabajos más en directo: “When in Rome” (1.988) y “Concert program” (1.995) donde destacan las buenas interpretaciones y que se caracterizan por algo: el segundo y último (es la última grabación del grupo) de ellos es como una especie de concierto privado, una sesión en directo sin gente ni aplausos donde el libreto se nos presenta como hoja de audición. Muy recomendable. También dos recopilatorios: “Preludes, Airs and Yodels” (1.996), con nuevas versiones del “HARMONIUM” (abreviatura que no se debe confundir con el tema de John Adams), pero que injustamente olvida piezas muy cualitosas; y “A brief history” (2.002) a modo de “recordatorio” para no olvidarnos de lo que han sido. Recordar como este grupo ha ido introduciendo sucesivamente temas de discos anteriores en cada una de sus nuevas grabaciones para favorecer la continuidad, lo que se ha convertido en otra invención pionera que no hay que dejar pasar de largo.
Salty Bean Fumble.
Aparte nombraremos “Still life” at the Penguin Cafe, un disco grabado en Londres en 1990 junto a la BBC Concert Orchestra y bajo la dirección de Barry Wordsworth, que consiste en la actuación del ballet llamado “Still life”, coordinado por David Bintley, y orquestada por Jeffes con clásicos de su obra para la Royal Ballet. En el encontramos los ya nombrados: “AIR A DANSER”,”PYTHAGORA’S TROUSERS” junto a “NUMBERS 1-4” (todos del segundo disco); “HORNS OF THE BULL” (cuarto); y “WHITE MISCHIEF”, “PRELUDE AND YODEL” y “NOW NOTHING” (tercero). La segunda parte es llamada: “Four pieces for orchestra” y contiene: “PERPETUUM MOBILE”, “OSCAR TANGO” y “SOUTHERN JUKEBOX MUSIC” (del cuarto álbum), más el consabido “HARMONIUM”. No aparecen muchos de los temas que más tarde formarían sus recopilatorios y los más “conocidos”, pero ello es en detrimento de las nuevas versiones que aquí se hacen. También se creó un vídeo del mismo título narrado por el actor Jeremy Irons de esta actuación, eso sí, la dificultad está en conseguirlo, solo recordar que aparece bajo el nombre del fundador de la banda y no de ésta (me refiero al VHS y el Cd, ambos).
En el cine y otros medios, sus temas han sido usados en millones de ocasiones, destacando la película “Oskar und Leni” (1.999) de Katharina Wagner, cuya BSO está formada en su integridad por música de la PCO. Lo restante se limita al diverso uso de sus temas para determinados filmes.
Por último, hablando de sus últimos lanzamientos: en el 2.000 surgió “Piano Music” una colección de piezas de Jeffes presentadas como un disco en solitario e interpretadas en directo, producido por Steve Nye; y el ya nombrado recopilatorio “A brief history”.
Paul's Dance.
Recordemos brevemente a los otros miembros que han pasado por el grupo:
-Barbara Bolte – Oboe.
-Stephen Fletcher – Piano. Desde 1.988.
-Helen Liebmann – Cello. (miembro fundador).
-Bob Loveday – Piano. Desde 1.985.
-Peter McGowan – Violín. Desde 1.989.
-Ian Maidman – Percusión/Bajo. Desde 1.985.
-Steve Nye – Viola. Miembro fundador y productor de varios de sus trabajos.
-Geoffrey Richardson – Viola. Desde1.976.
-Julio Segovia – Percusión. Músico argentino con formación en España que ahora actúa con su Segovia Acoustic Band.
-Annie Whitehead – Trombón. Desde 1.991.
Todos estos miembros guardan gran experiencia y han colaborado con diversos grupos y artistas de todos los estilos, y son una buena muestra de la idiosincrasia “ciudadana del mundo” de la PCO.
Para terminar, les dejo con toda su discografía, y, recuerden, yo ya no tengo nada más que decir de ellos, no se preocupen por clasificarlos dentro de alguna rama, disfruten con su Arte y verán que todo lo demás no importa (y, si pueden, visiten el Penguin Cafe, que sí existe realmente y aparece en la portada del último álbum recopilatorio):
-MUSIC FROM THE PENGUIN CAFE – EGGCD (ahora en Virgin), 1976.
-PENGUIN CAFE ORCHESTRA – EGGCD (Virgin), 1.981.
-BROADCASTING FROM HOME – EGGCD (Virgin), 1.984.
-SIGNS OF LIFE – EGGCD (Virgin), 1.987.
-WHEN IN ROME (directo) – EGGCD (Virgin), 1.988.
-SIMON JEFFES – STILL LIFE AT THE PENGUIN CAFE – DECCA, 1.989.
-UNION CAFE – ZOPF, 1.993.
-CONCERT PROGRAM (directo, 2Cds) – ZOPF, 1.995.
-PRELUDES, AIRS AND YODELS (Recopilatorio) – AMBT, 1.996.
-SIMON JEFFES – PIANO MUSIC – ZOPF, 2.000.
-A BRIEF STORY (Recopilatorio) – ZOPF, 2002.
1 comentario:
Creo que no tengo ni la cultura ni la capacidad musical para apreciar totalmente esta entrada, pero me ha encantado "Perpetuum mobile" si la encuentro por algún lado va directa a mi mp3 (sutil indirecta para decir que si la tienes que me la pases jijiji).
Respecto lo del academicismo musical sigo teniendo un bote de spray plateado que ilustraría mucho mejor lo que opino de ellos... vale, sigo siendo mala de Barrio Sésamo.
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